Los groguets se adelantaron en el primer minuto del partido con un gol de Danjuma, pero Lukebakio empató justo antes del descanso. Finalmente, el Villarreal decidió el encuentro en los últimos instantes gracias a un gol del exjugador bético en el Ramón Sánchez-Pizjuán.
El Villarreal tuvo un inicio de temporada liguero muy exigente, con tres partidos en una semana, lo que llevó a Marcelino a hacer rotaciones en el Ramón Sánchez-Pizjuán. El técnico asturiano introdujo cuatro cambios en comparación con el partido contra el Atlético, dando la primera titularidad de la temporada a Nicolas Pepe, Pape Gueye, Willy Kambwala y a Ilias Akhomach.
Los amarillos sorprendieron al Sevilla desde el comienzo. En el primer minuto, Baena envió un excelente pase al espacio, superando a los defensas sevillistas y encontrando a Arnaut Danjuma. El neerlandés se impuso en velocidad a los centrales, llegó al área y superó a Nyland con una gran definición, anotando su segundo gol en dos partidos.
El Sevilla respondió rápidamente. En el minuto 7, Juanlu anotó un gol que fue anulado por fuera de juego. Los groguets mostraron cierta fragilidad defensiva en una jugada que comenzó con un saque de banda.
En los minutos siguientes, el Villarreal tuvo problemas para iniciar su juego. El Sevilla recuperaba el balón en zonas peligrosas y ponía en aprietos a los groguets, que se defendían en bloque bajo y buscaban contragolpear.
Diego Conde salvó al equipo en el minuto 36, realizando una parada crucial ante un disparo cruzado de Saúl, quien intentó marcar tras recibir un buen pase de Ocampos.
Al igual que contra el Atlético, el Sevilla empató justo antes del descanso. Un pase largo hacia Lukebakio terminó en gol. El extremo belga se adelantó a los defensores groguets y, sin controlar el balón, remató con potencia para batir a Diego Conde. Así, el primer tiempo terminó 1-1.
En la segunda mitad, el Villarreal salió más motivado. Dominó los primeros minutos y tuvo una buena oportunidad con Danjuma, nuevamente asistido por Baena, aunque en esta ocasión Nyland detuvo el disparo.
A pesar del buen comienzo del Villarreal, el Sevilla fue ganando terreno con el paso de los minutos. Los locales pusieron en serios aprietos a Conde, quien se lució con una doble intervención destacada tras un error en la salida de balón del Villarreal. Poco después, el portero volvió a salvar a su equipo desviando un tiro libre de Saúl al travesaño. Fueron los momentos más complicados para los amarillos, que sufrían bajo el asedio del equipo andaluz.
Marcelino realizó cambios, refrescando la línea ofensiva con las entradas de Ayoze y Barry por Danjuma y Pepe. Antes del minuto 70, Santi Comesaña marcó el 1-2 tras un pase de Ilias Akhomach, pero el gol fue anulado por un fuera de juego milimétrico de Barry en el inicio de la jugada, dejando al Villarreal con mala fortuna.
Después de esa acción, Yeremy Pino y Dani Parejo ingresaron al campo, sustituyendo a Ilias Akhomach y Santi Comesaña, quienes habían participado en el gol anulado. En los minutos finales, Albiol reemplazó a Bailly, quien tenía molestias físicas.
En los últimos instantes, el Sevilla presionó y encerró al Villarreal en su área, obligándolos a defender con todo para mantener el empate.
Sin embargo, en una jugada final, Ayoze cambió el destino del partido. El tinerfeño silenció el Ramón Sánchez-Pizjuán al anotar el 1-2 en el último suspiro, aprovechando un rebote en el área. Con este gol, el Villarreal se llevó la victoria en una plaza muy difícil.